“Todo lo sólido se desvanece en el aire” // Lila M. Feldman

Clarice Lispector escribió un libro maravilloso, llamado “La pasión según G.H”.

Volvió a mí en estos días, junto a la evocación de “La metamorfosis”, de Franz Kafka.

Una mujer, o un hombre, ante un “extraño despertar”, suceso o acontecimiento de plena desposesión y rotunda transformación, y el esfuerzo y el querer  hallar en el lenguaje, ese “esfuerzo humano” por excelencia, caminos de interrogación, de asombro y de puesta en suspenso, y caminos (aun provisorios) de verdad y sentido. Todo lo que se era dejó de ser, está mutando, o ha mutado, y desesperadamente buscamos reencontrar un cuerpo-mundo-vida habitable. Nos despertamos y ya no somos quienes éramos, el mundo no es el que era, ¿cuántas veces escuchamos hablar a lo largo de estos días, de cierta vivencia de “pesadilla”? Clarice habla de “idioma sonámbulo”, porque tenemos que fabricar palabras como si lo que nos aconteciera fuera crear…

“Coronavirus”  es el nombre que hizo de nuestro mundo –hecho de certezas y algunas tranquilidades- reino de lo provisorio y lo frágil. O testimonio, re-descubrimiento, verificación, de que la vida es “antinatural”, y que los mundos que construimos también pueden matarnos. Que el progreso es ficción. Que la ciencia sin política no ilumina ni protege a nadie. Que lo extraño, ajeno, enfermo, mortal, destructivo, también proviene de nosotros.

“La metamorfosis” podría ser un título para esta experiencia. Ya no únicamente de los misterios del ser, de lo misterioso que es ser, o querer ser, uno mismo. También hoy, al mismo tiempo, asombro, descubrimiento de un mundo que se derrumba, de lo que tambalea, de lo que combina extrañeza, perplejidad, y también trabajo de pensamiento. Recuperar un mundo que necesariamente deberá ser vuelto a inventar.

Vuelvo a Clarice, y su pluma, esa historia de un atrevimiento, el atrevimiento de convertirse una misma en pregunta, vaciarse de sentidos, como si nos  quitaramos sucesivos trajes o capas hasta desnudar el vértigo de vivir, y de vivir algo propio, en un nuevo mundo. G.H. son iniciales, y el nombre de una intuición, de un coraje, de una des-significación  y re-significación: ¿seremos capaces de mirar cara a cara lo más repugnante, absorverlo, incorporarlo? ¿ o huiremos en la derrota o en la contemplación? ¿renunciaremos al acercamiento penoso y alegre a la vez, de poder preguntarnos por las condiciones del ser y del mundo, una vez más? 

Queda en nosotros asumir la posibilidad y la tarea de vivir la vida en estado de metamorfosis. ¿Quiénes somos? ¿entre quienes somos? ¿Y en qué mundo?

“Todo lo sólido se desvanece en el aire”, escribía Marshall Berman, citando a Marx y.a.Engels. Es una frase que flota en el aire, muy palpable, hoy. 

2 Comments

  1. Amé especialmente la gran pregunta ¿renunciaremos al acercamiento penoso y alegre a la vez, de poder preguntarnos por las condiciones del ser y del mundo, una vez más?

    Queda en nosotros asumir la posibilidad y la tarea de vivir la vida en estado de metamorfosis. ¿Quiénes somos? ¿entre quienes somos? ¿Y en qué mundo?

    “Todo lo sólido se desvanece en el aire”, escribía Marshall Berman, citando a Marx y a Engels. Es una frase que flota en el aire, muy palpable, hoy.

    Creo que este tiempo quedará para siempre grabado en el disco rígido de quienes tenemos el privilegio de poder pensar más allá de las urgencias.

  2. El texto tiene muy poco sentido si lo vemos como un análisis de lo que esta pasando actualmente, si lo vemos como un desvarío «poético» o surrealista quizás si podría aportar algo a entender la situación actual, de otra forma, poco o nada, para sustentar mis palabras, analicemos un párrafo del texto:

    “Coronavirus» es el nombre que hizo de nuestro mundo –hecho de certezas y algunas tranquilidades- reino de lo provisorio y lo frágil. (esta frase no podría dejar más patente la definición de un lugar común, las personas de todas las épocas han pasado multitud de vicisitudes y catástrofes que les han demostrado que su realidad/mundo/sociedad es frágil y provisorio, es algo que siempre se ha sabido y por tanto un simple lugar común).

    O testimonio, re-descubrimiento, verificación, de que la vida es “antinatural”(¿La vida es antinatural? ¿A qué se refiere el autor con esta frase? No tiene ningún sentido bajo ningún contexto).

    , y que los mundos que construimos también pueden matarnos (Otro lugar común mas…).
    Que el progreso es ficción ¿Creería el autor de este texto que son ficciones los avances tecnológicos que tenemos ahora comparados con los del siglo 1 A.C? El progreso en algunas ramas es real, sobre todo en la ciencia y la tecnología, obviamente si hablamos de lo social o lo político es otra historia, pero al no especificarlo, el autor queda mal parado).

    Que la ciencia sin política no ilumina ni protege a nadie. (Esta frase es directamente estúpida, si el autor de este texto le preguntará a las victimas de experimentos científicos hechos por la alemania Nazi, el comunismo de Stalin o el militarismo japones de la SGM, que prefieren ¿Ciencia despolitizada o con política?, la respuesta es evidente y es totalmente la contraria a la afirmación de autor.

    Que lo extraño, ajeno, enfermo, mortal, destructivo, también proviene de nosotros.(El autor solo sabe escribir sobre lugares comunes…)

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