Del encuentro participaron también miembros del Espacio de Tierras de Todos y Todas de Florencio Varela; Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS); Procuraduría de Criminalidad Económica y Lavado de Activos (ProCELAc); del Centro de Políticas Públicas para el Socialismo (CePPaS); Red de Niñez y Territorio; Red Graneros de Sueño; Proyecto Cultural Los Otros; Espacio Cultural Rebelde Amanecer y
Este texto fue escrito al calor de las deliberaciones y leído al final del encuentro:
El modelo neodesarrollista que pretende inclusión vía acceso al consumo muestra signos de agotamiento: el impacto socioambiental de una economía basada en el extractivismo, el recrudecimiento de políticas represivas contra organizaciones sociales, el incremento de fuerzas de seguridad en los barrios y la reaparición de un discurso racista desde el estado, entre otros.
Ante esto, las organizaciones venimos ensayando estrategias para afirmar y defender nuestro derecho a la vida con políticas concretas: desde la ocupación de tierras a la creación de medios propios de comunicación, desde la producción agroecológica de alimentos a los encuentros culturales en espacios públicos, desde el trabajo con jóvenes a la investigación del delito financiero. Se trata en definitiva de alimentar políticas de la vida que se impongan sobre las lógicas de muerte.
Sin embargo, constatamos en nuestros cuerpos que no alcanza: las organizaciones sociales tenemos necesidad de alianzas porque aisladas podemos menos. Necesitamos articulaciones cada vez más amplias entre los movimientos y junto a actores e instituciones que no excluyen al estado. Para nosotros, sin embargo, el punto de acumulación siempre parte desde abajo, de la autonomía de nuestras organizaciones.
Es desde allí que desafiamos día a día a las políticas de muerte y que nos preparamos para construir instrumentos de movilización social.
Por todo esto conformamos
De cara a 2015, ante un viraje anti popular que ya se constata en los gobiernos, tenemos el enorme desafío de sostener los avances logrados durante la última década gracias a las luchas sociales y de potenciar nuestra creatividad política. Creemos que solo desde allí podremos proyectar, entre todos, las formas en las que queremos vivir.