por el Club de Investigaciones Urbanas de Rosario
Ayer martes 18 de noviembre, familiares de Franco Casco, el defensor general de la provincia de Santa Fe y abogado querellante en la causa Gabriel Ganón, junto a organizaciones reunidos en la Multisectorial en Lucha por el pedido de Justicia por Franco, realizaron una conferencia de prensa en la puerta de los Tribunales Provinciales. El objetivo: fisurar el cerco mediático impuesto por el gobierno provincial en torno a la causa abierta a raíz de la desaparición y asesinato del joven de Florencio Varela, detenido por la policía de Santa Fe el 7 de octubre de este año. El Movimiento 26 de Junio facilitó las carpas que tiene instaladas en el lugar desde hace una semana para acompañar la realización del juicio a los culpables -materiales e intelectuales- del Triple Crimen de Villa Moreno. Las declaraciones de los padres y de Gabriel Ganón se centraron en la responsabilidad de la policía provincial en el asesinato de Franco y denunciaron la complicidad de funcionarios indispensables para mantener impune este siniestro caso de violencia institucional. Asimismo, Ganón fundamentó las razones por las que debe caratularse la causa como desaparición forzada de persona con jurisdicción federal: “Los argumentos son claros. Lo dijo la Corte Suprema de Justicia de la Nación en un caso de Neuquén. Lo sostuvo la Corte Interamericana de Derechos Humanos en el caso de Iván Torres, y lo dijo la Justicia federal por la desaparición de Jorge Julio López y de Luciano Arruga. Esto es contundente. La última vez que Franco estuvo con vida fue en una comisaría de Santa Fe. Y la provincia es responsable de que Franco haya aparecido flotando en el río”.
Al final de la conferencia, Ramón, padre de Franco Casco, leyó frente a los micrófonos una contundente carta abierta elaborada por la familia dirigida al gobernador de la provincia Antonio Bonfatti:
***Carta Abierta al Gobernador Bonfatti y a los Poderes Públicos de la Provincia de Santa FeSeñor Gobernador, usted no nos conoce personalmente, somos Elsa Godoy y Ramón Casco. Yo, Elsa, apenas puedo sostenerme después de lo que pasó con Franco. Tengo 54 años y 10 hijos. Con Ramón de 59 años, papá de Franco, estuvimos más de 20 años juntos.
Vivimos en Florencio Varela. Somos una familia humilde, trabajadora. Franco, al que usted tampoco conocía, era uno de mis hijos. Franco hace poco más de un mes decidió tomarse unos pocos días de vacaciones de su trabajo como albañil y viajar a Rosario, la ciudad más grande de la provincia que usted gobierna, a visitar a parte de nuestra familia. Vino con sus pocas cosas en dos mochilas, un short deportivo de Argentina porque era apasionado del fútbol, un pantalón y una campera de River, de quien era hincha fanático. También la plata justa y un par de zapatillas negras Nike nuevas que compró para el viaje.
Sé que a usted poco le importan estos detalles, y aún no sabemos si le preocupa y se ocupa de lo que pasó con Franco. Lo hemos visto públicamente preocuparse de las amenazas sufridas por un periodista famoso y nos parece bien, pero creo que también debería preocuparle un caso tan grave como el que sucedió con Franco, en el que la policía -su policía- nos asesinó a nuestro hijo. Un pibe normal, padre de un bebé de 3 años, Thiago, que le gustaba el fútbol, las chicas y trabajar.
Sé que no es importante para usted esto ni lo otro pero para nosotros todos los detalles son muy importantes porque son parte de los recuerdos que nos quedan de él.
Le aclaramos, aunque no le importe, que hace más de una semana le hemos pedido formalmente una audiencia y ni usted ni sus secretarios nos han contestado.
Como le decía, Franco era un pibe común de barrio. Trabajaba desde muy chico ayudando a su papá. Aunque había terminado el secundario, no pudo seguir estudiando. Ya se lo dije: somos una familia muy humilde. Todo nos cuesta mucho sacrificio. Estoy muy triste con lo que pasó con mi hijo y apenas puedo pensar y escribir. Sin embargo, los compañeros y compañeras me han echado una mano con esto.
Señor gobernador, sé que usted tiene hijos, también jóvenes como Franco. Sé que usted los quiere y cuida mucho. No dudo que si usted estuviese atravesando el momento que nosotros estamos atravesando estaría triste y además querría saber por qué pasó lo que pasó con Franco. Porque la policía lo asesinó y lo tiró al río. Porque funcionarios de su gobierno intentaron ocultar la verdad plantando pruebas falsas, porque jamás lo buscaron.
Entiendo también que los pibes como sus hijos están lejos de que les ocurra una cosa como ésta. Sin embargo, señor gobernador, apelo a sus sentimientos personales para pedirle especialmente que ponga todos sus esfuerzos en esclarecer el hecho y tome las medidas que corresponda con quienes no investigaron, ocultaron y asesinaron a mi hijo.
Elsa Godoy – Madre de Franco Casco
Ramón Casco – Padre de Franco Casco Familiares de Franco |
Más información sobre el asesinato de Franco |
Para mayor información, contactarse con el Club de Investigaciones Urbanas de Rosario al (0341) 15 5927 870.
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